Parece algo innecesario, pero te sorprenderías cuánto puede cambiar tu vida encontrar un navegador que responda a tus necesidades. El problema es que nadie puede decidirlo por vos. Las variables son muchas e impensadas, por lo general recomendamos un navegador por su estabilidad, velocidad, seguridad y tamaño, pero la razón por las que elegir uno pueden ser totalmente diferentes. En su momento me enamoré de Flock (hoy discontinuado aunque exista RockMelt) porque producto de sus funciones podía arrastrar texto a determinados lugares de la pantalla, lo que me permitía avanzar muy rápido en el trabajo (hacía clipping de noticias). No me importaba que fuera un poco más pesado, que demorara más en abrir ni otras características que lo habrían puesto al final de varios rankings.
Ahora, la inutilidad de un navegador o su obsolescencia es diferente. Porque no necesariamente entorpecen tu trabajo sino que simplemente no lo impulsan ni benefician. Algo así como la diferencia entre naufragar teniendo puesto un salvavidas que te mantiene a flote hasta que te rescaten (y evita que te ahogues) y hacerlo sin salvavidas, pero que te rescaten inmediatamente.
El de hoy no es uno que yo elegiría, pero tal vez vos sí y por eso te invito a probarlo. Se llama Polarity y según prometen consume muchísima menos memoria. Se trata de otro navegador con la posibilidad de manejar pestañas que se vale del motor Trident del pésimo Internet Explorer y que se encuentra en una instancia de crecimiento, por lo que no proporciona builds 100% estables, lo cual puede complicarte en algún que otro momento, pero es algo que si lo tenés en cuenta a la hora de trabajar (como hacíamos cuando no existían los navegadores estables) es algo que puede no molestarte.
La merma en el consumo de memoria prometida por Polarity se logra con un recolector de basura, un mecanismo implícito (algo así como automático) de gestión de memoria que se implementa en algunos lenguajes para que las programadoras no tengan que prever el volcado y la limpieza de la memoria manualmente. Esto permite un uso más eficiente de este hardware que según las desarrolladoras en el caso de Polarity permite abrir 20 pestañas en simultáneo consumiendo sólo 45 megas.
Paralelo a esto el motor Trident es diferente a los basados en Chromium (el navegador libre en el que se basa el privativo de Google) a la hora de manejar pestañas, esto hace que se hay algún tipo de cuelgue, el conflicto se resuelve en la pestaña en que se produce y no en todo el motor, lo que redunda en una suerte de mayor estabilidad.
Te invitamos a probarlo con algunos recaudos, uno de ellos es que es detectado como un virus por muchos softwares, aunque especialistas han podido comprobar con VirusTotal que se tratan de falsos positivos.
Dale una probadita.
¡Happy Hacking!